martes, septiembre 23, 2008

Noches de "Ensuelo"

No se podían pisar las lineas del suelo, mientras caminaba me entretenía pensando en que no se podía pisar las lineas del suelo, y quien así lo hiciera sufriría consecuencias terribles, mas graves que la muerte misma, me había porque mirar al frente, no importaba hacia que lugar caminábamos ni de donde veníamos, importaba caminar, caminar sin pisar las lineas que hubiera en el suelo, pues en el suelo existen todo tipo de lineas, hay grietas en el pavimento y el cemento entre una baldosa y otra, alcantarillas, lineas amarillas y blancas, que en realidad son señales de transito, ladrillos, los cuales exigían un dominio mayor del equilibrio, porque los ladrillos son pequeños y se debe uno parar en puntas para no tocar las lineas que dejan los ladrillos en el suelo, como esas había millones de lineas que debía desafiar cada vez que caminaba, lineas hambrientas que esperaban devorarme cuando errara el siguiente paso, lineas que todavía me carcomen por dentro, lineas eternas, infinitas, lineas del suelo ¿quien no jugaba con las lineas del suelo cuando era chico?
Mientras caminaba, además de no pisar las lineas del suelo, hacia que las demás personas las pisaran, para que sufrieran las horribles consecuencias de haber perdido el juego, de haber pisado la linea, por pisar una que otra linea no pasa nada, pero hay personas que pisan demasiadas lineas, cien o doscientas en solo un recorrido, para esas personas si hay varios problemas, el primero se da cuando les asalta la duda alguna noche de insomnio, les asalta la duda sobre si habrán pisado demasiadas lineas en su vida, puede que a algunos nunca les llegue a asaltar la duda, pero a los que si les asalta se les convierte en el peor tormento jamas vivido, les asalta la duda una noche, ellos creen que es simplemente un pensamiento extraño, que ya se olvidara, pero unas semanas después vuelven a pensar en eso, y se preguntan: ¿tendrá algo de malo pisar demasiadas lineas mientras se camina? Después piensan en eso cada noche, luego en las mañanas, al mediodía, hasta que no pueden hacer otra cosa que pensar en las lineas que pisan mientras caminan, entonces valerosos deciden encarar el problema, caminan decididos y van de esquina a esquina esquivando las lineas del suelo, pero se hallan la sorpresa de que las escaleras que suben a su oficina están plagadas de diminutos ladrillos que tienen miles de pequeñas lineas intocables pero imposibles de no tocar.
Entonces los hombrecitos suben las escaleras tocando lineas con desenfreno mientras la culpa inevitable les quema las tripas o renuncian a su trabajo y consiguen un trabajo donde no se tengan que pisar tantas lineas para llegar a la oficina.
Pero el tormento para aquellos que decidieron con gallardía seguir pisando lineas desaforadamente sin pensar en las consecuencias es aun mayor, esta gente seguirá pisando lineas por varios meses y la duda seguirá presente de vez en cuando durante una que otra noche o quizá la siesta del mediodía, pero poco a poco desaparecerá, y el hombre que pisa lineas se ira olvidando poco a poco de que las pisa, y las pisara por años enteros sin notarlo, pisar lineas se volverá tan cotidiano, que el hombre nunca mas agachara la cabeza para esquivar la división entre un bloque de concreto y el vértice del anden, el hombre olvidara los secretos de las calles de la ciudad, progresivamente se ira olvidando también de caminar, se transformara en un ente mecánico que camina y sube escaleras sin pensar en nada, con la mente en blanco, como una maquina que no pretende mas que su objetivo, el de caminar hacia adelante, subir escaleras y trabajar en el escritorio, ir al baño, almorzar, regresar al escritorio, al apartamento, comer un sandwich, dormir y despertar, despertar para caminar hacia adelante y subir escaleras.
La maquina que no piensa, dejara de ser consiente no solo de no pisar las lineas de los andenes, sino de los andenes mismos, sus pasos serán simples repeticiones de pasos que dio antes, nunca volverá a sentir que se siente caminar, dejara de sentir, de pensar, el hombre que pisa demasiadas lineas en el suelo tendrá su fin inexpugnable en la inexistencia, no existirá mas.
Es por eso que yo preferiría morir antes que pisar las lineas del suelo.
Así me divertía yo, saltando las alcantarillas y desafiando las grietas de las calles, empujando a los demás a la linea del anden, la linea que sumada a muchas otras lineas que pisen mientras caminen, les resultaran en el perdida final de su destino, en dejar de vivir pero sin morir aun, como un purgatorio en alquiler, mientras mueres y vas al verdadero purgatorio, quedate en este, sin vida y pisando lineas con descontrol. Aferrándote a una falsa vida que dejo de darte vida hace mucho tiempo.
En ocasiones, cuando no puedo dormir, me quedo pensando en la oscuridad de mi habitación, y me pregunto que sera de esa gente sin vida, y me doy cuenta también, de que hace muchos días que no me fijo bien cuantas lineas piso al caminar, me asalta una duda terrible que no me deja mantener el sueño toda la noche, me quedo preguntándome en silencio que tan vivo estaré, en ocasiones no recuerdo siquiera que no se podían pisar las lineas del suelo.

domingo, septiembre 21, 2008

Que pesada y asfixiante acusacion...

A veces la pelicula, puede ser tan buena que extiende la obra literaria, El Padrino fue tan buena que Mario Puzo escribio los guiones para la segunda y la tercera parte. Al Pacino y Marlon Brando montaron una gran obra, y precisamente lo lograron no por mostrar su talento, sino por ocultarlo magnificamente. El buen artista despues de lograr mediante el trabajo y la preparacion un buen desarrollo de su obra, debe esconder tras el contenidomismode la obra este trabajo, es decir, yo como espectador no debo ver a el mejor actor del mundo, debo ver a Vito Corleone, eso es lo que logran, lo sublime, en ocaciones el buen cine vale mas que mil palabras.
Obviamente existen cosas que son rotundas y en mi opinion un poco cegada por la admiracion: inadaptables, sin embargo transformables, claro esta, despues de copiarlas y copiarlas.
Por ejemplo, nadie puede escribir lo que Chaplin hacia en la pantalla o nadie podra filmar lo que Cortazar escribia, es decir, si podrian filmarlo pero seria flato de gracia, como en ese cuento de las goticas de Cortazar, que narra como se caen las goticas del libro y habla de las garritas de las goticas y todo. No hay nada como la imagen personal de cada quien acerca de las garritas de una gotica, por eso si se generalizara mediante una imagen plural (porque se vera en sociedad) perderia todo su encanto, no seria mas Cortazar.

Quisiera irme lejos, lejos, lejos y ser como los gitanos, vivir de plaza en plaza por las grandes ciudades del mundo, teniendo como mayor responsabilidad: La irresponsabilidad total.
Debe ser mejor vivir que analizar, la irracionalidad tiene su parte genial, como la inconciencia.

Debe ser mucho mejor ser Vito Corleone que ser Marlon Brando, debe ser incluso mejor que ser Mario Puzo, porque el ya sabe que va a pasar, el solo lo escribe, vivirlo seria mejor aun que ver la pelicula, corrijo entonces tu acusacion:

Es como vivirlo y despues leer el libro o verse la pelicula.

Los puntos de giro predescibles son todo menos puntos de giro.

domingo, septiembre 07, 2008

Antonimos Anonimos

Lastima nacer y no salir con vida...

La necesidad de un contrario, de una oposición, de algo que vaya en dirección opuesta, un antagónico, un nemesis, es una de las leyes que rigen la existencia de todas las cosas. Rige incluso a la misma existencia, la ausencia, como termino distante, se planta orgullosa y altanera sobre el cadáver de nuestro lenguaje, contradice la existencia misma.
La ausencia, podríamos deducir, contrasta todo lo existente, pues si bien, el blanco se opone al negro, el no-negro también se oponen a este. La ausencia puede ser ausencia de ausencia, y seria infinidad.
Pero existe algo a lo que ni la ausencia misma podría oponerse, (nótese que la frase tiene un grave problema de lógica común, puesto que si "existe" puede entonces "no existir" o "ser ausente" por lo cual si podría ser opuesto por la ausencia.) la ausencia de oposición, nada es "esencia individual" todo es comparable y contradictorio respecto a todo, incluso cuando hablamos de grados de contradicción, porque el gris, aunque se opone al blanco, se opone menos que el negro al blanco, y además se opone también al negro, provocando una relación de proporcionalidad inversa, entre el gris mas se oponga al blanco, menos se opondrá al negro.

La ausencia de oposición seria entonces, simple y llanamente: inexistencia, es decir, ausencia misma, pero no ausencia común, es decir (nuevamente), algo que no tenga oposición, ni siquiera puede ser considerado inexistente, puesto que lo inexistente halla su opuesto en lo existente, debe ser considerado algo realmente intangible, impensable (cualidades que no son del todo ciertas, puesto que estas describen cosas que pueden existir o no, pero no se habla de cosas que existan o no, se habla de otro tipo de cosas, cosas realmente vacías, que no gozan de ninguna esencia, que no pueden ser percibidas, cosas que no son cosas) además de completamente desproporcionado, algo que no solo no existe, si no que tampoco se encuentra en el grupo de cosas que no existen.
Abriríamos así un tercer calificativo para las cosas del mundo, lo existente, lo inexistente y lo... llamemoslo: "Desexistente", es ya sabido, que este nombre, solo consiste en la forma de iconizar mediante nuestro rico lenguaje, algo (que tampoco es algo, es claro) que no puede considerarse siquiera nombrable o comprendible, Desexistir, no es no tener sentido, pero tampoco es no tenerlo, es vacío e infinito a la vez, pero también es no vacío y no infinito, es todo aquello que nunca podremos alcanzar con nuestra mente, exacto es inalcanzable, es decir, lo que no existe es pensable, como un Galimataso, o un Gladio Vorpal.
Lo que no existe también existe por su inexistencia misma, lo que desexiste no es que no exista, es que es tan existente que se hace inexistente dentro de la inexistencia.
No es que sea difícil de comprender es que es imposible, pero ojo!, tampoco puede ser imposible de comprender, pues esta característica le daría una clasificación, es algo que no goza de NINGUNA CARACTERÍSTICA, no goza ni siquiera de la característica de no tener características, simplemente no tiene y ya.
Este documento no solo es lo mas bizarro y sin sentido que se halla escrito jamas, sino que también es la evidencia misma de la infinidad, ya reconsiderábamos lo infinito como INEXISTENTE, por eso esto no es simplemente Infinito, es infinito dentro de lo infinito, es tan indescifrable como la misma confusión, es mas caótico que el caos en si. Existe mas que la misma existencia, pues por su calidad (nuevamente una palabra mal empleada) de Desexistir, es tan tangible como intangible.
Lo que desexiste es aun mas relevante que el dilema sobre la existencia de Dios, ya que este no trasciende la existencia o la inexistencia, la vitalidad de lo Desexistente es mas valioso que cualquier pregunta que pueda formular un Hombre o un Dios, es algo mas Conexo y desconexo a la vez, que la inmortalidad y la mortalidad, que la blanco y lo negro, que lo sacro y lo profano. Puesto que no tiene opuesto.
Lo desexistente hace que la búsqueda de sentido para cualquier cosa sea inútil, lo desexistente se independiza de Dios, pues Dios creo lo que existe y lo que no existe, pero no creo lo que desexiste, porque lo que desexiste es impensable para Dios mismo, es tan relativo como objetivo, lo que desexiste es el factor mas trascendental en la historia, mas viejo que la historia misma, y mas joven que el fin de los tiempos, mas constante que el tiempo y mas palpable que lo evidente. No podemos decir que nunca nadie lo va a comprender, porque si así fuera no seria tan desexistente como la desexistencia misma.

DAVID SANTIAGO RODRIGUEZ DE VEGA
"Vale mas creer que se vale que valer en si"

miércoles, septiembre 03, 2008

El Ultimo Cuarto

No se podía mirar a los ojos, nadie nunca la pudo mirar a los ojos, no se sabe porque, jamas se supo de que color tenia los ojos, se sabia que eran preciosos que ojos mas lindos que esos no existían, que eran los ojos mas lindos de este mundo, eso se sabia, pero nadie vio los dichosos ojos.
La niña era callada, se habia trasteado con sus papas a la casa de enfrente hace como dos semanas, no se si es que era tímida o que no había encontrado nadie con quien hablar en el mundo, jamas pronuncio palabra alguna, por estos lados nadie le oyó la voz, decían que su voz era tan dulce como la miel, que era impactante, que oírla cantar era como oír a un ángel, pero igual que con sus ojos, nadie nunca le oyó la voz.
Su rutina era siempre la misma, salia en las mañanas a la colina, corría por el prado y iba comiéndose una manzana, siempre comía una manzana, pero dejaba el corazón, seguro era que no le gustaban las semillas de la manzana, todos los días salia y se comía su manzana y dejaba el corazón en la falda de algún árbol, después regresaba a su casa, como ella no iba al colegio, siempre se quedaba viendo contra la ventana, pero no veía nada, por que cerraba los ojos, a lo mejor era para que nadie se los viera, tal vez no quería compartir su belleza con nadie y entonces se quedaba horas contra el espejo admirándose lo bonita que era, gastando todas sus miradas en si misma, para que cuando saliera ya nadie la pudiera mirar y para que ella no pudiera mirar a nadie, porque ella para que quería ver a alguien mas si viéndose a si misma ya veía lo que necesitaba ver, total y plena perfección. El caso es que no supe nunca que era lo que hacia cuando yo me iba al colegio, excepto un día, que me hice el enfermo solo para poder verla, me llene los zapatos de hielo para que me dieran mocos y fiebre, y claro cuando me pusieron ese termómetro yo estaba ardiendo, quien sabe cuantos grados, pero eso si, mi mama se puso preocupadisima, por poquito y me llevan al hospital, ahí si se me hubiera dañado todo, porque terminaba enfermo y no alcanzaba a ver que era lo que hacia la niña que se había trasteado al frente mio hace unas semanas, pero menos mal logre convencer a mi mama de que me dejara descansando en la casa mientras ella se iba a trabajar.
Ese día me quede contra la ventana buscando donde se metía la niña cuando yo me iba al colegio, pero estaba dentro de su casa y no alcanzaba a ver nada, entonces salí con la excusa de que estaba elevando una cometa, porque uno siempre sale a elevar una cometa como excusa para lograr algo, nadie sale a elevar una cometa porque si, por elevar la cometa, nadie es tan estúpido como para salir al viento y al frió solo para ver como una tela se mece con el viento arriba de uno, no, no creo que halla en el mundo alguien tan estúpido, en fin, volar una cometa era lo suficientemente estúpido como para no llamar mucho la atención y lo suficientemente extraño como para no pasar por estúpido.
Salí a volar mi cometa y me fui acercando cuidadosamente a la ventana que daba contra el cuarto de la niña, tenia unos velos blancos transparentosos, me acerque lo suficiente para detallar su silueta, sostenía algo en su mano, un objeto largo, no lograba ver que era, me acerque un poco mas, ya distinguía colores en la habitación de la niña, pude entonces verla, observarla desnuda parada sobre una silla, identifique entonces el largo cuchillo que empuñaba iracunda en su mano izquierda, era hermosa, definitivamente perfecta. Fue cuando pura, noble, completamente misericordiosa me dejo a mi y a ustedes lectores que leen mi relato, esperando por un climax, un quiebre, un final inesperado o quizá tan esperado que resulte inesperado, no, no hubo punto de giro, no hubo nada, simplemente arrojo el cuchillo al piso abrió los velos de la ventana y se queda riéndose de mi y de mi mirada atónita, no la pude ver mas, salí corriendo de aquel lugar y nunca pude quitarme la imagen de sus carcajadas tronantes que se burlaron de mi, de mi esperando que sucediera algo increíble, pero no fue así, ella me dominaba la mente, me mecía como el viento a una triste cometa, como algunas letras a un papel vacío que cobra sentido, como un papel a quien lo lee, afanado, distraido pero esclavo, esclavo e indigno, casi prostituido.