domingo, noviembre 18, 2007

La tregua de una legua pisada por mi lengua (Ultima Parte)

Como pensar en el rio de los desesperados?
Pensara el hombre de la silla en el parque, el hombre que no tiene reloj, el hombre de una ciudad sin estaciones, que se queja y se queja de la lluvia.
Todas las mañanas sale a caminar con su viejo baston, y oye los ruidos de las guitarras en la calle, cada dia un nuevo hippie, porque ellos si que se cansan de una misma ciudad, una misma ciudad sin estaciones, y añoran el invierno de Madrid, cantando las canciones que sonaban en la radio hace decadas para hacer dinero y salir de alli.
Pero el se queja y se queja de la lluvia, del ruido de la lluvia y de los carros mojados, de los charcos y de los perros que ladran, nunca le gusto la lluvia, y nunca tuvo reloj, siempre el tiempo le fue indiferente, sus años oyendo Jazz sentado al piano habian terminado, llego a decir: ya todo en la musica esta hecho, y lo mantuvo hasta que la noche del 31 de diciembre del 69 lloro y lloro, dicen que esa noche llovio en todo el mundo, ese dia vendio el piano y nunca volvio a sentarse junto a su tocadiscos, a la mañana siguiente, salio a caminar al parque por primera vez, tiempo despues compro su baston, nunca quizo un perro, porque ladraba con la lluvia. Y el odiaba la lluvia.


Hoy ha muerto el ciego! a las tres y cuarto de la tarde, mientras caminaba por el parque, al verlo caer el perro de un hippie ladro y mordio su baston. Llovia y era invierno en Madrid. Hoy.
Mañana? alguien inventara un nuevo Jazz.
Como pensar adaptarse al frio?

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