martes, junio 12, 2007

La Agonia mas errada del mundo.
Nunca fue un gran pianista, solo tocaba por divertirse, no queria ganar, solo con obtener alguna que otra sonrisa en su auditorio de turno le bastaba, sus dedos cada dia jugaban mas, y auqnque aveces se arriesgaba y caia en el magico y peligroso juego de la improvisacion, nunca perdia el tiempo de la melodia real y si caia en el ocio rapidamente volvia a lo escrito, a lo seguro, a lo ya definido, a lo que el ya conocia, pero que debia procurar olvidarlo, conocerlo justo en el instante en el que lo tocaba, un bajo en La menor, mientras arriba, dos octavas mas alla, su mano derecha jugaba con algunos modos, doricos, jonicos, sonaba bastante griego, y quien dice que por sonar griego no puede el tocar algo de Latin?
Todo iba bien hasta que le dijeron lo bien que tocaba, la gente dejo de sonreir y comenzo a pagar, nunca mas volvio a tomarse el juego, lo hacia aburrido, sabiendo que su vida no trascenderia mas alla de algunos acordes, el oficio del arte no fu emas alla del ocio, se quedo con su dinero y con sus funciones todas las noches, pero siempre sonaba griego, siempre las mismas dos octavas arriba, nunca se divirtio como antes, se le olvido, el queria sentirlo nuevamente, siempre el mismo bajo en La de todas las noches, pero ya era tarde, no habia pues ninguna nota en el piano que lo devolviese a los tiempos en que cada nota era una sonrisa, y se sonria asi sonara desafinado...

1 comentario:

Juan Pablo Angarita Bernal dijo...

Me acordé de Kurt Cobain...usted sabe , que se mató porque ya no sentía lo mismo al tocar.

Qué difícil, qué difícil